Mitos y Realidades de la Vesícula

Hay muchos mitos sobre las razones por las cuales la Vesícula Biliar se inflama y duele. No todas son ciertas y a continuación te dejamos 6 mitos importantes que debes saber:
1.- Disgustos. Si tuviste algún disgusto, seguro te duele la Vesícula.
El dolor vesicular no tiene relación con los corajes, tiene relación con el consumo de comida con grasas, lácteos, huevo o aguacate.
2.- ¿Tienes piedras en la vesícula? Seguro se forman por ser enojón.
Las piedras en la vesícula se forman a través de los años por niveles elevados de colesterol o triglicéridos, cuestiones hormonales (por eso es más frecuente en mujeres), bajar de peso rápidamente o algunas características genéticas.
3.- Las piedras en la vesícula se puede deshacer con medicamentos.
Las piedras en la vesícula no se pueden deshacer con ningún: té, licuado, medicamento naturista o de otro tipo. El emplear estas pseudoterapias solo retrasa el tratamiento oportuno y los pone en riesgo de complicaciones.
4.- Se pueden sacar solo las piedras de la vesícula por cirugía.
La cirugía para resolver la enfermedad vesicular no es solo sacar las piedras o litos, se tiene que extraer la vesícula completa y las piedras que tiene adentro.
5.- La cirugía de vesícula se realiza con laser.
La cirugía de vesícula más moderna en la actualidad no es la láser, de hecho la cirugía láser de vesícula no existe y es solo un mito de boca en boca. La cirugía más moderna para resolver esta enfermedad se llama laparoscópica y se realiza a través de incisiones de unos milímetros en el abdomen.
6.- Después de la cirugía de vesícula ya no puedes comer lo mismo.
La vesícula no es un órgano indispensable y el cuerpo se adapta a no tenerla, por lo que un mes después de la cirugía puedes comenzar a comer como anteriormente lo hacías sin consecuencias.
¿Ya conoces la cirugía de vesícula por imágenes de fluorescencia?
Los procedimientos por fluorescencia permiten visualizar lo que no se puede ver con luz blanca convencional. Por ejemplo el diagnóstico fotodinámico se emplea para comprobar la proliferación patológica de productos porfirínicos fluorescentes en los tumores en la vejiga. En tanto, la reproducción de imagen por fluorescencia en el infrarrojo cercano también amplía el abanico del diagnóstico y sirve, por ejemplo, para evaluar la perfusión de órganos y tejidos, así como para visualizar los conductos biliares